Durango, Dgo. -Los olores fétidos que salían de un domicilio ubicado en el fraccionamiento Río Dorado, provocaron que sus vecinos avisaran a las autoridades de lo que, sospecharon, se trataba de una defunción; sin embargo, resultó ser comida descompuesta.
Fue el lunes por la tarde cuando elementos de corporaciones policiacas locales se trasladaron hasta el edificio “C” de la manzana 3 del referido asentamiento, ubicado en la salida a Zacatecas, para verificar la situación.
Según se explicó a los policías, el morador del inmueble -un joven aparentemente ligado a varios hechos delictivos- dejó de ser visto por los vecinos hace varios días, por lo que se preocuparon por el olor a pudrición que salía por la puerta de su departamento, en el cuarto piso.
Al llegar, los agentes confirmaron que, en efecto, había olores fétidos saliendo del lugar, por lo que se tomó la decisión de forzar la chapa e ingresar para revisar el sitio.
Sin embargo, lo que se creía era una persona fallecida, resultaron ser alimentos dejados fuera del refrigerador que ya estaban descompuestos, lo que generó los malos olores que percibían los vecinos.
Una vez descartada la situación, el sitio fue dejado en manos de la administración del conjunto habitacional.
Es de apuntar que, de acuerdo a los testimonios recopilados, el sujeto en cuestión intentó cometer un delito de naturaleza sexual hace algunas semanas contra una vecina del fraccionamiento Río Dorado, lo que incluso provocó una reacción colectiva en su contra.
Después de eso, se supo de su ingreso a su departamento hace 15 días y fue la última vez que lo vieron.