Nueva York, 22 sep (EFE).- El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, expuso este jueves ante un grupo de inversores estadounidenses la estabilidad macroeconómica en España en un momento de crisis geopolítica que se ha traducido en fuertes tensiones inflacionistas en el mundo y la sombra de una recesión.

Sánchez tuvo un desayuno de trabajo en Nueva York con altos responsables de bancos y fondos de inversión, casi todos ellos ya presentes en España, que se interesaron por las medidas que el Gobierno tiene previstas en los próximos meses para hacer frente a la inestabilidad geopolítica y sus consecuencias, según supo Efe de fuentes conocedoras del encuentro.

El presidente incidió, por ejemplo, en la reforma del mercado energético que impulsa no solo en España, sino también en Europa, con el impulso de las interconexiones eléctricas, la diversificación de proveedores de hidrocarburos, la situación de España como plataforma de regasificación y la apuesta por las renovables, subrayando que la guerra de Ucrania no puede detener los procesos de transformación del país hacia una economía verde.

Quiso además mandar un mensaje tranquilizador de que el Gobierno cumplirá con los compromisos de estabilidad fiscal europeos, pese a que el contexto internacional se presenta complicado.

Apoyó sus argumentos en lo que llamó una buena situación de partida: un sector financiero saneado, la recuperación del turismo (sector vital en España en generación de empleo y aporte al PIB) y un crecimiento sostenido de las exportaciones; en resumidas cuentas, dijo Sánchez, la economía española goza de buena salud.

El presidente abundó además en los grandes proyectos de infraestructura en marcha, el proceso hacia la digitalización o el apoyo a los nuevos emprendedores como argumentos que hacen de España un país atractivo como destino de inversiones.

El desayuno de trabajo de Sánchez con los inversores es uno de los últimos actos de la agenda del presidente en Nueva York en esta su última jornada que concluirá con su discurso ante la Asamblea General, antes de volar acto seguido a España esta misma noche del jueves. EFE