Los daños que dejan las marchas que se realizan con diferentes temas en la ciudad capital, que normalmente se traducen en pintas en fachadas de los edificios históricos, llegan a costar hasta 360 mil pesos, esto de acuerdo a datos del Centro INAH Durango.
Juan Antonio Reyes Valdez, delegado en Durango del Instituto Nacional de Antropología e Historia, informó que dicha cifra fue la que se pagó a través del seguro de daños contra inmuebles históricos el año pasado tras la marcha del Día Internacional de la Mujer el 8 de marzo.
Sin embargo, esa no fue la única afectación que tuvieron los edificios históricos, pues sucedieron dos marchas más realizadas por grupos feministas tras casos de denuncias de violación y acoso que terminaron con pintas en diferentes edificios del centro histórico.
Entre los inmuebles que presentaron más daños se encontró la Catedral de Durango, la cual debió ser intervenida, pero también estuvieron monumentos, estatuas y otros edificios, esto sin contar los daños a inmuebles que no se encuentran inventariados en el padrón.
Reyes Valdez recordó que son los propietarios de dichos edificios los que deben tomar medidas preventivas para evitar estas afectaciones, como ha sido la colocación de vallas en otros estados; “el llamado es a cuidar el patrimonio histórico, tanto a dueños como a manifestantes”.
