Pekín, 27 feb (Sputnik).- China podría ser uno de los países mediadores para resolver el conflicto ruso-ucraniano, declaró a Sputnik Wang Zaibang, investigador principal del Instituto Taihe.
“Es muy probable que (China) decida actuar como mediador junto con los países correspondientes, China debería ser capaz de proporcionar plataforma y comodidades para que Rusia y Ucrania puedan sentarse a la mesa de negociaciones”, dijo.
Al comentar el plan, elaborado por el Ministerio de Exteriores de China para resolver la crisis ucraniana y publicado el viernes pasado, el experto subrayó que fue un resultado de “una importante decisión, tomada tras un integral análisis del impacto del conflicto ruso-ucraniano a gran escala”.
Wang indicó que el conflicto de Moscú y Kiev afectó considerablemente el desarrollo de la economía global y de China, en particular.
Al mismo tiempo, la promoción de la solución política de la crisis “ayudará a crear un entorno favorable y seguro para el desarrollo de la economía global y china”, contribuirá a la transición de Ucrania a la recuperación de posguerra, así como a la restauración de los lazos políticos y económicos de Rusia con otros países, añadió el experto chino.
En lo referente a los aspectos territoriales, no mencionados en el documento, Wang señaló que estas cuestiones se deben resolver durante las negociaciones de paz, y ahora lo más importante es empezar a hablar.
China presentó la semana pasada 12 planteamientos clave, a su juicio, para la solución política de la crisis de Ucrania, a saber: respetar la soberanía de todos los países; abandonar la mentalidad de la guerra fría; cesar las hostilidades; reanudar las conversaciones por la paz; resolver la crisis humanitaria; proteger a los civiles y prisioneros de guerra; mantener la seguridad de las centrales nucleares; reducir los riesgos estratégicos; facilitar las exportaciones de cereales; poner fin a las sanciones unilaterales; mantener estables las cadenas industriales y de suministro; y promover la reconstrucción posconflicto.
Desde el 24 de febrero de 2022, Rusia continúa con su operación militar especial en Ucrania alegando que las repúblicas de Donetsk y Lugansk –inicialmente reconocidas por Moscú como Estados soberanos y en septiembre pasado incorporadas al territorio ruso tras sendos referendos– necesitaban ayuda, como lo denunciaban, frente al genocidio por parte de Kiev.
Numerosos países condenaron la operación rusa y apoyan a Kiev con suministros de armas, donaciones, ayuda humanitaria y sanciones contra Moscú. (Sputnik)