Ante los daños que se causaron en el puente de Otinapa, que se construyó a inicios del sigo XX, el regidor Manuel de la Peña presentó un punto de acuerdo en la sesión de Cabildo, para pedir que se investigue la propiedad de este puente, el motivo de su desmantelamiento y se solicite la donación a favor del Municipio de Durango, así como que sea restaurado.
Durante la sesión de Cabildo Abierto el regidor por Movimiento Ciudadano recordó que se trata de un puente que es parte de la historia del municipio, el cual fue construido al inicio del siglo XX, como parte de un proyecto ferroviario que buscaba conectar a Durango con el puerto de Mazatlán, que aunque nunca se concretó, dejó el puente, con una altura de 120 metros y una longitud de 388 metros, como testimonio de la ingeniería de principios de ese siglo.
Recordó que a lo largo de los años se convirtió en un destino popular para el ecoturismo y el turismo de aventura, “ahí hubo y hay actividades como el salto de bunge, senderismo, rappel, motocross, bicicleta, entre otros.
“En días pasados tuvimos conocimiento de que se estaban llevando a cabo trabajos de desmantelamiento, que no tenía ninguna explicación oficial, el cual en algún momento trató de confundirse con un incendio”, dijo, al indicar que no se encontraron huellas de que haya habido un siniestro de este tipo.
Luego de indicar que la situación de este puente puede tener repercusiones significativas en el turismo local, por ser un sitio de los más atractivos para los amantes de la aventura en Durango, el regidor pidió a la administración que investigue la propiedad del puente, el motivo del desmantelamiento y solicite la donación del mismo al Municipio de Durango, así como también que la Dirección de Obras Públicas y la de Fomento Económico y Turismo realicen un proyecto ejecutivo para restaurar y aprovechar este lugar, propuesta que fue aprobada de forma unánime por los integrantes del Cabildo.