La reducción de la jornada laboral de 48 a 40 horas a la semana continúa dividiendo opiniones dentro del sector empresarial duranguense. Mientras algunos creen que se afectará la productividad, otros lo ven como una posibilidad de hacer más eficiente el trabajo.
Fernando Castro, presidente de la Asociación de Industriales de Maquinaria Pesada, consideró que, invariablemente, disminuir las horas de trabajo repercutirá en la productividad, pues es difícil pensar que se podrá hacer con menos tiempo el mismo trabajo.
“Creo que estas decisiones deben tomarse de manera paulatina. Es un tema social que toma tiempo, quizá una generación completa. Yo diría que mínimo unos 12 años para acostumbrarnos a rendir el mismo trabajo en menos horas”, puntualizó el entrevistado.
En tanto, Salvador Chávez Molina, presidente de la Cámara Nacional de Desarrolladores de Vivienda (Canadevi), afirmó que el sector empresarial no puede ir en contra de decisiones que signifiquen que el trabajador cuente con más tiempo para estar con su familia.
“En todo caso, es cuestión de capacitar al trabajador, para que sea más eficiente y el tiempo que llega a perder trabajando 8 horas lo haga de trabajo en seis. Si se va a hacer el mismo trabajo en menos tiempo para nosotros como empresarios no hay problema”, expresó.