Mónica Rubalcava
Ciudad de México, 26 jul (EFE).- Convertidas en un ejemplo de fortaleza, la cantante argentina Amanda Miguel y su hija Ana Victoria, demuestran desde el escenario que la vida sigue, pues pese a la muerte de Diego Verdaguer (esposo y padre, a finales de enero), ambas han retomado sus carreras con una gira dedicada al intérprete de “Volveré”.
“Yo jamás me imaginé quedarme viuda, te juro por Dios que lo que menos me imaginé era eso porque me siento joven, y me dicen, ‘sos una guerrera, pero qué bárbara, con esa carrera que tienes y toda tu fuerza’, y me suben el autoestima”, respondió este martes en entrevista con Efe la cantante de 66 años
“Pero para las personas que no tienen una carrera como yo, seguramente tienen algo de qué agarrarse, de su familia, de su trabajo, siempre hay algo para que lo te puede agarrar con el motivo de tu vida”, añadió.
El 27 de enero de este año Verdaguer falleció a causa de complicaciones por coronavirus.
Si bien el camino no ha sido sencillo, ha sido “natural”, según describió la cantante, quien sumó a su hija Ana Victoria al tour “Siempre te amaré”, que de principio estaba planeado para llevarse a cabo con su marido y que fue pospuesto en dos ocasiones, por la pandemia y después por el deceso.
“Uno va aceptando, recapacitando, tomando responsabilidad y tarde o temprano las cosas van surgiendo”, resalta la argentina, quien dice tener una gran responsabilidad con ella misma.
“Estos dos años nos han afectado a muchas personas, nosotros somos un vivo ejemplo de eso, y queremos demostrarle al público que a pesar de lo doloroso, la vida tiene que seguir y disfrutar de lo bello”, contó a Efe Ana Victoria.
Ahora, madre e hija están por pararse en el escenario por primera vez en muchos meses como parte de la gira que comienza el sábado 30 de julio en Las Vegas, para comenzar el primer encuentro de 30 que se tienen planeados en Estados Unidos y que posteriormente continuarán en México.
“Para mí esta gira es algo que yo debo hacer en honor a él, por lo que él siempre me admiró como cantante, como su esposa y por haberme escrito las canciones que me escribió y que escribí junto con él. Es una manera de honrar su trabajo, su dedicación, él me dedicó toda su vida y no me dejo un solo problema”, declaró Amanda.
UN SENTIMIENTO
La intérprete de “Él me mintió” confesó que cantar las canciones de Diego, las suyas y las que crearon en conjunto ha sido todo un reto emocional que la ha obligado a mantener un temple especial, pues los recuerdos del amor que se tuvieron son imposibles de evadir y logran llevarla a las lágrimas.
“Yo he tratado últimamente de controlarme, porque cuando me emociono no puedo cantar y es algo a lo que le esquivo. Trato de reponerme y ponerme fuerte para no sentir lo que tuviera ganas de hacer si estuviera sola”, menciona.
Asimismo, Ana Victoria, quien recientemente se convirtió en madre, ha tenido que vivir en un contraste constante de la felicidad de haberse convertido en madre poco antes del fallecimiento de su padre, pero también de tristeza por su ausencia, pues una de sus mayores ilusiones era que Lucca, su bebé, pasara tiempo con él.
“Yo siento que la vida me quitó un gran amor y me dio un gran amor, porque fue muy junto (ambos sucesos). Tengo que valorar mucho a mi hijo porque es una cosa hermosísima y me conmueve verlo tan lleno de luz, con esa sonrisa hermosa. Llegó en un momento crucial para ambas (…) nos ha forzado a estar bien, a ser una mamá alegre, no una mamá deprimida. Él no me ha permitido caer en ningún momento”, dijo Ana.
Ambas coincidieron en que el legado de Diego sigue vivo, que han atravesado por una situación complicada desde el amor y la unión y que una de las razones por las que continúan es para seguir sus propios sueños y cumplir los inconclusos que dejó el cantante.
“Creo que el proceso de trascender lo vivió con mucha paz y espiritualidad y muy consciente de lo que fue la circunstancia. El creía mucho que la vida no se acababa, que era cíclica y que reempezaría un nuevo ciclo de vida cuando ese momento llegara, él está en ese camino”, finalizó Ana Victoria. EFE