Durango, Dgo. -Luego de un juicio que inició el pasado mes de marzo, fue sentenciado a 33 años de cárcel un duranguense que fue detenido por la Interpol cuando intentaba cruzar de Estados Unidos a México, esto tras cometer un secuestro en esta entidad en el año 2019.
El ya condenado es Javier Villarreal Violante de 55 años de edad, originario del municipio de San Juan del Río, sitio en el que, con la complicidad de su primo también sentenciado, Martín Villarreal Almonte, cometió el referido delito.
La detención ocurrió el 8 de marzo de este 2022 en el cruce fronterizo de la ciudad de Reynosa, Tamaulipas, y corrió a cargo de agentes mexicanos de la Policía Internacional.
Según la narrativa de la Fiscalía General del Estado, fue la noche del 23 de agosto de 2019 cuando Javier, que conocía a su víctima, un varón de 35 años de edad, la convenció de que saliera de su domicilio en la localidad de San Agustín de Ocampo.
Lo hizo a bordo de una camioneta pick-up. Una vez ahí, tanto él como su primo (que vigilaba los movimientos de la víctima) lo amagaron con un arma de fuego, lo subieron a la unidad motriz y lo llevaron hasta la localidad de Donato Guerra, en Canatlán.
Ahí lo pusieron en cautiverio, mientras pedían una fuerte cantidad de dinero a su familia a cambio de su liberación; sin embargo, en un momento lo dejaron solo y eso lo aprovechó la víctima para escapar y pedir apoyo de lugareños, que lo resguardaron en lo que llegaban al sitio las autoridades.
Los delincuentes, sin embargo, huyeron. No obstante, el 10 de octubre de ese mismo año se ejecutó una orden de aprehensión contra Martín, que fue sentenciado poco después por el delito de secuestro agravado.
Javier se mantuvo huyendo durante más tiempo y se refugió en Estados Unidos; sin embargo, en marzo pasado -casi tres años después del secuestro- fue localizado y detenido, por lo que se le llevó a juicio.
El juez de la causa determinó para él una sentencia condenatoria de 33 años y 4 meses de prisión, así como el pago de una multa de 225 mil 307 pesos.