Daniel Sánchez Dórame
Hermosillo (México), 11 sep (EFE).- Unos 500 atletas de origen indígena, que participaron en 125 disciplinas, protagonizaron y animaron el XXIII Encuentro Nacional de Juegos y Deportes Autóctonos y Tradicionales 2022 durante este fin semana en la ciudad de Hermosillo, estado de Sonora, en el noroeste de México.
En la justa, “tanto organizadores como deportistas descubrieron nuevas competencias tradicionales que practican los pueblos originarios del noroeste de México”, reveló Ana Claudia Collado García, presidenta de la Federación Mexicana de Juegos y Deportes Autóctonos y Tradicionales (Fmjdat).
“Uno de los objetivos de la reunión era la inclusión de Sonora, porque queremos provocar a las comunidades (locales), que nos han comentado que no sabían que había juegos que se estaban recuperando en los pueblos originarios”, declaró Collado García.
En Hermosillo “nos enseñaron el juego de la caña, que es una actividad de la nación Comca’ac (tribu Seri), así como del ‘amoi’ que es un juego lunar, del cual uno de los investigadores de la Escuela Nacional de Antropología están desarrollando un estudio muy particular”, agregó.
En el encuentro participaron delegaciones de los estados de Tabasco, Campeche, Chiapas, Chihuahua, Ciudad de México, Colima, Guerrero, Michoacán, Nuevo León, Oaxaca, Puebla, Querétaro, Tlaxcala, Veracruz y Sonora.
La federativa recordó que uno de los aspectos más importantes de este encuentro de juegos y deportes tradicionales indígenas, es investigar la relación de estas actividades con la cosmovisión y cosmogonía de los pueblos originarios.
“Muchas de estas actividades son de larga historia, tienen más de 3.000 años, están relacionados con la cosmovisión de los pueblos originarios”, expuso.
Y explicó que en el caso de los juegos de destreza mental están relacionados con la cosmovisión, pero también a cómo contaban, nuestros antepasados, la gestación de un ser humano, los periodos de siembra, los tiempos de cosecha, sus calendarios solares y de adivinación”, agregó Collado.
En las presentaciones y exposiciones de juegos prehispánicos se destacó el Juego de Uárhukua (Juego de Pelota Purépecha) mientras que en las competencias tradicionales de destreza mental compitieron en Témbini Iumu, que significa 15 (tembini = 10, iumu = 5) y tiene un significado cosmogónico en la cultura purépecha.
“Tenemos cuatro líneas, esto nos representa las cuatro etapas en la vida, los cuarto rumbos en el universo, así como también las cuatro estaciones del año, es decir, el tablero es la vida, cada numeración tiene un simbolismo y cada palillo tiene la representación de reyes de la cultura purépecha”, explicó Omar Alonzo de la Cruz, vicepresidente de Juegos Autóctonos de Michoacán.
En el Centro Histórico de Hermosillo se presentaron Estampas culturales originarias, como lo fue la Danza del Venado, la representación del Tecuani de los nativos del estado de Guerrero, así como la riqueza artística milenaria, la llamada P’asarhutakua Ch’anakua (Juego de Pelota encendida) de Michoacán.
Un grupo de 14 personas de comunidades indígenas como Tiríndaro (municipio de Zacapu); Zacán (Los Reyes) y Angahuan (Uruapan), así como de Lázaro Cárdenas y Morelia, dieron muestra de este tradicional juego, que data desde hace más de 3.500 años. EFE