- Columna Sena de Negros por: Dionel Sena
Finalmente se cerró el registro para los que aspiran a dirigir al Partido Acción Nacional en el estado de Durango, en donde la batalla quedará en manos de puros varones, pues las damas decidieron no registrarse, por lo que el sucesor de Verónica Pérez deberá salir de entre Mario Salazar, Gerardo Galaviz y Bernardo Loera, este último sorprendiendo al panismo con su registro, pues hasta hace unas semanas, no había levantado la mano para dicha aspiración, por lo que será interesante el papel que juegue en la campaña y a quien pudiera beneficiar o perjudicar con su registro, llegado el momento, pues es respaldado por un fuerte grupo político en el municipio de la capital, lo que le pudiera dar posibilidades de competir, aunque para que ello ocurra, le faltará llevar su proyecto al resto del estado y eso lo sabe mejor que nadie el experimentado panista.
Por ahora, no pareciera haber condiciones como para que se diera una candidatura de unidad entre alguno de los tiradores, pues hay tres registros y cada uno de ellos, quiere llegar hasta las últimas instancias para obtener el resultado, el cual decidirán poco más de 5 mil panistas diseminados en los 39 municipios del estado, aunque en honor a la verdad, la gran mayoría se encuentran concentrados en la capital, la Comarca Lagunera y Santiago Papasquiaro, por mencionar algunos, a donde los tres aspirantes deberán llevar su mensaje y esperar a que sean escuchados y respaldados en las urnas, pues a mediados de diciembre, se decidirá el futuro de ese partido en los años por venir, lo que en definitiva, no será un tema menor, máxime cuando se sabe que seguramente seguirán en alianza con el PRI y el PRD, este último, prácticamente, ya un apéndice de Acción Nacional en los últimos años, pero con su propio capital político.
Un factor que no es menor, es que los resultados electorales del pasado 5 de junio, se pudieron construir a partir de la candidatura a gobernador de Esteban Villegas, quien le cumplió a Acción Nacional, incorporando a su gabinete a cualquier cantidad de activos de ese instituto político, quizá como nunca en la historia, pues incluso ni la pasada administración estatal, tuvo tantas posiciones como la actual, de ahí que quizá, como mera cortesía, le pregunten al jefe político estatal que opina de quién pudiera llegar a convertirse en el nuevo pastor blanquiazul, pues al final, su partido, el PRI, deberá negociar con él, el proceso electoral del 2024, para lo cual, deberán estar en la misma sintonía, pues dichos comicios serán muy diferentes a los que se acaban de vivir y no hay que ser un genio para saberlo, por lo que el PAN deberá contar con una dirigencia legitimada, llegado el momento.
Por ahora, no se ha detectado guerra sucia entre los participantes, lo que sí, es que ninguno de ellos, se ha dejado ver con el ex gobernador, el cual tiene mucho que aclarar sobre la manera en que dejó al estado y de ahí que ninguno quiera cargar con esos negativos, que más que aportarles, les restan y eso lo saben ellos mejor que nadie, por lo que no sería extraño que dentro de la campaña que deberá durar un mes aproximadamente, se le vea muy ausente al ex mandatario, que por más que simpatice con alguno de los proyectos, él mejor que nadie sabe que ni siquiera en su partido es bien visto en estos momentos, de ahí que se crea que en el 2024, no tendrá los argumentos como para levantar la mano solicitando ir en alguna candidatura, aunque hay quienes piensan que sí la levantará, con todo lo que ello pudiera implicar.
Al tiempo…