“La altitud obviamente será el principal desafío; nos pondrá a prueba. Te das cuenta que los muchachos aspiran un poco más, eso es bueno porque nos prepara de cara al juego del lunes”, dijo Garoppolo previo al partido de la semana 11 de la temporada 2022 de NFL.
Los 49ers trabajan desde el jueves pasado en Colorado Springs, ciudad ubicada al sur de Denver, que está 1.839 metros sobre el nivel del mar como preparación para su contienda de este lunes en la Ciudad de México que se encuentra a una altitud de 2.400 metros.
El mariscal de campo ganador de dos anillos de Super Bowl, que obtuvo cuando jugó para los New England Patriots como respaldo de Tom Brady, subrayó que a pesar de los cambios en las rutinas de entrenamiento estarán preparados para jugar en el Azteca.
“El viaje implica que tu horario no es el mismo, la rutina no es la misma, pero sólo tienes que adaptarte y seguir; es algo que hemos hecho antes, así que no es nada nuevo para nosotros”, expresó.
Garoppolo negó que la altitud le restará precisión en sus pases y puso como ejemplo el partido de la semana tres en el que los 49ers visitaron a los Denver Broncos, duelo que aunque perdieron 11-10, él completó 18 de 29 envíos.
“Todos me han preguntando eso. No noto gran diferencia. Lo sentí cuando jugamos contra Denver a principios de este año, realmente el balón no vuela tan diferente; no es algo en lo que haya pensado demasiado para ser honesto”.
Los San Francisco 49ers viajarán este domingo a la Ciudad de México después del entrenamiento en Colorado Springs.
El lunes los gambusinos enfrentarán por segunda vez en la historia en un partido de temporada regular de la NFL a los Arizona Cardinals en el Estadio Azteca. La primera ocasión fue en el 2005, cuando perdieron por 31-14.
En esta campaña San Francisco ocupa la segunda posición del Oeste de la NFC con cinco partidos ganados y cuatro perdidos; los Cardinals, son terceros en la misma división con marca de 4-6. EFE