Durango, Dgo.
El intento desesperado de un automovilista por no chocar contra el vehículo que tenía delante, derivó no sólo en daños a las dos unidades motrices, sino también en el derribo de un poste de telefonía.
En el hecho de tránsito, afortunadamente, no hubo personas con lesiones de consideración, por lo que al final todo quedó en trámites administrativos.
Los hechos ocurrieron cuando el conductor de una camioneta Chevrolet Colorado circulaba rumbo al oriente por la avenida San Ignacio, justo al exterior de la Unidad Administrativa Municipal, y no guardó la distancia suficiente hacia el vehículo que estaba adelante, una Nissan Urvan.
En un último intento por no chocar, el conductor de la pick-up dio un volantazo, que si bien evitó el golpe de lleno contra la camioneta tipo panel, acabó por derribar un poste de madera.
Tras el siniestro, sólo fue necesaria la presencia de la Policía Vial, que se encargó de los trámites necesarios para iniciar el deslinde de responsabilidades.