Ciudad de México, 14 jun (Sputnik).- La deuda pública de México se ubicó en 40,8 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) en 2021, una reducción de siete décimas de punto porcentual con respecto al año anterior, indica un informe de la Comisión Económica para América Latina (Cepal) publicado el lunes.
“México cerró el año con una deuda pública bruta de 40,8 por ciento, ligeramente menor al dato de 41,5 por ciento del año previo”, detalla el documento Panorama Fiscal de América Latina y el Caribe 2022.
El país norteamricano se colocó en 2021 entre las cinco naciones de América Latina con la menor deuda pública bruta del gobierno central, como proporción del PIB, indica el análisis del organismo económico regional de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
México se suma a cuatro países: Chile, con una deuda pública de 32,5 por ciento de su PIB; Perú, con 32,9 por ciento; Guatemala, 31.5 por ciento y Paraguay, 29,5 por ciento.
DEBAJO DEL PROMEDIO REGIONAL
La segunda economía del subcontinente se ubicó por debajo del promedio de América Latina, de 56,5 por ciento.
“En México el bajo crecimiento de la recaudación tributaria se debió al efecto base producido por las medidas que el Servicio de Administración Tributaria (SAT, federal) adoptó en el 2020”, indica el análisis del endeudamiento público de las economías regionales.
Los analistas del organismo consideran que esas medidas de recaudación gubernamentales “generaron recursos adicionales equivalentes a un 2,2 por ciento del PIB en dicho año”.
La Cepal estima que, al cierre de 2021, México se sumó así a las disminuciones en la relación entre la deuda pública bruta y el PIB en otros países que “se explica, principalmente, por la recuperación de la actividad económica”.
Sin embargo, a pesar de esta reducción del endeudamiento público como proporción del PIB “se mantiene en un nivel históricamente alto y supera los niveles observados en los últimos 20 años previos a la pandemia”, señala la comisión económica latinoamericana y caribeña.
Durante la contingencia sanitaria y la crisis económica que estalló en 2020 por el covid-19, el Gobierno de México otorgó un muy bajo monto de estímulos fiscales, y evitó el endeudamiento para financiar apoyos al sector empresarial, en comparación con otras naciones.
En contraste, de lado de los ingresos, México fue uno de los cuatro países de América Latina que observaron una disminución en el 2021; sin embargo, la caída de los ingresos fiscales mexicanos fue un marginal 0,1 por ciento.
Los Gobiernos de otros países sufrieron mayores contracciones como Uruguay, de 0,6 por ciento y Argentina, de un elevado 2,9 por ciento.
El Gobierno mexicano aplica una política económica bautizada como “austeridad republicana”, que consiste en recortar el gasto público al máximo posible, aplicar un presupuesto gubernamental sobrio, y concentrar el gasto del Estado en programas sociales y asistencia directa a la población beneficiaria, además de combatir la evasión fiscal. (Sputnik)