Downing Street, residencia y despacho del líder conservador, difundió una carta en la que éste argumenta que “no es el momento” de celebrar esa consulta, después de la que ya se organizó en 2014, que ganaron los partidarios de la permanencia en el Reino Unido.
En respuesta, Sturgeon aseguró en Twitter que “Escocia tendrá la oportunidad de elegir la independencia”, si no en ese referéndum ,”a través de unas elecciones generales” plebiscitarias. “La democracia escocesa no será prisionera de este ni de ningún otro primer ministro”, añadió.
La líder del Partido Nacional Escocés (SNP, en inglés) anunció en junio que pediría la aprobación del Ejecutivo central pero, sabiendo que le sería denegada, al mismo tiempo legislaría para organizar ese plebiscito. Esa legislación está siendo analizada ahora por el Tribunal Supremo británico.
La difusión de la carta coincide con la crisis en el Gobierno británico que podría llevar a la salida de Johnson en las próximas horas.
Un numeroso grupo de sus ministros se ha reunido en Downing Street para pedirle que dimita. Uno de ellos ha indicado a la BBC que, si rechaza hacerlo, el gabinete se rebelará. EFE