Cajeme (México), 26 jul (EFE).- Un lote armas nuevas, pistolas y metralletas, que el Ejército mexicano decomisó a un grupo criminal que opera el narcotráfico en la región noroeste de México, fueron entregadas este martes a los agentes de la Policía del municipio de Cajeme, estado de Sonora, uno de los más violentos en México.
La acción fue llevada a cabo por el Gobierno del estado y forma parte de una propuesta de Reforma Constitucional que el gobernador de Sonora, Alfonso Durazo, hizo al presidente Andrés Manuel López Obrador y su gabinete de Seguridad, mediante la que se busca aprovechar vehículos y armamento que las autoridades decomisen a los grupos delincuenciales.
“Estuve en Cajeme entregando armas largas y cortas, este armamento fue asegurado a criminales; históricamente estas armas se destruían y yo propuse en la última visita del presidente y el gabinete de Seguridad, que también todos los vehículos asegurados a criminales por las dependencias federales, pasaran al servicio de las policías estatales y municipales”, explicó Durazo.
El mandatario estatal y extitular de la Secretaría de Seguridad de México entregó 50 pistolas y 30 rifles de asalto, esto con el objetivo de mejorar el arsenal con el que cuenta la Policía en Ciudad Obregón y el Valle del Yaqui, que conforman Cajeme, uno de los municipios con más narcomenudeo y homicidios dolosos en el país.
“Toda arma nueva, que no ha sido utilizada y no puede vincularse con violencia, que pase al Gobierno del estado para que las asigne a las policías municipales y estatales que con frecuencia no tienen armas o su arsenal es sumamente viejo y deficiente, así fue que logramos en Cajeme la primera entrega a los policías”, expuso Durazo.
El funcionario dijo que junto a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) está impulsando una iniciativa de Reforma Constitucional para que toda arma nueva y vehículo decomisado al crimen organizado sea entregado para su uso a instituciones de seguridad de municipios y estados del país.
A inicios de marzo, agentes del Ejército mexicano, junto con la Guardia Nacional y agentes ministeriales de la Fiscalía General de la República (FGR) hallaron un arsenal con 3 millones de cartuchos útiles, 15.000 cargadores, 128 armas largas, 19 ametralladoras y una subametralladora, seis fusiles, ocho vehículos, cuatro remolques y hasta una planta de luz.
El arsenal fue considerado como un decomiso histórico por el número de armas y cartuchos, las cuales, de acuerdo con la Secretaría de Seguridad Pública Nacional, pertenecían al grupo delictivo “Los Salazar”, brazo armado del Cártel del Pacífico en Sonora, quienes tienen su bastión en el municipios Navojoa donde ocurrieron las revisiones a cuatro casas de seguridad. EFE