Las piscinas y las playas son uno de los lugares más comunes de accidentes y muertes por ahogamiento. Es en estos lugares en los que se necesitan tácticas de rescate para salvar vidas.
El ahogamiento puede ocurrir en tan solo 20 segundos, la mayoría de los casos de niños que se ahogan en piscinas, bañeras o piscinas inflables. En el caso de adultos es en las playas.
La reanimación cardiopulmonar (RCP) es una técnica médica de emergencia en la cual el administrador intenta mejorar la respiración de alguien con compresiones torácicas y respiraciones por la boca.
Este es un procedimiento extremadamente importante para aprender, ya que aumenta enormemente las posibilidades de supervivencia de una persona. Esta técnica ha permitido salvar un gran número de vidas, especialmente dentro y alrededor de las piscinas y playas.
Una de las razones por la que la RCP es tan exitosa es el hecho de que es relativamente fácil de administrar y tanto niños como adultos pueden aprenderla, por lo que la Cruz Roja exhorta a capacitarse como primer respondiente en caso de emergencia y así poder salvar una vida.