“En el escenario en el que los gobiernos avanzan hacia una pausa en el logro de emisiones netas cero a mediados de siglo con subsidios, con servicios públicos (…) la deuda pública aumenta entre un 45 por ciento y un 50 por ciento”, explicó el funcionario en la presentación del Monitor Fiscal y el Informe de Estabilidad Financiera Global del FMI.
El organismo considera fiscalmente insostenible un escenario en el que los gobiernos dejarían de lograr emisiones netas cero, añadió.
Mooij advirtió a los gobiernos que no pongan un peso excesivo en el sector privado porque tal postura podría generar oposición política y falta de apoyo público.
“Las restricciones fiscales pueden relajarse significativamente mediante una combinación de políticas. En ese escenario, la deuda aumenta entre un 10 por ciento y un 15 por ciento en lugar de un 45 por ciento a un 50 por ciento”, explicó.
Para Mooij, encontrar la combinación adecuada de políticas y la visión correcta de responsabilidades entre los gobiernos y el sector privado permitirá evitar problemas.
Los países deberían “flexibilizar las líneas rojas” e implementar políticas de gasto adecuadas para apoyar a las poblaciones y regiones vulnerables, añadió. (Sputnik)