México tiene un pie en la escalerilla del avión ante la derrota clara, no contundente, pero precisa, que subraya el nivel futbolístico de Argentina, que es superior en todos los aspectos, hasta en la dirección técnica.
La selección azteca llevaba los jugadores para presentar un cuadro ambicioso, para ir a buscar el gol frente a Argentina, pero el “Tata” volvió a meter las cuatro. Pudo mandar a Uriel Antuna y Alexis Vega por los costados y a Jiménez o Funes Mori en el centro del ataque.
Martino mandó un equipo chato, que desde la dirección técnica renunció al ataque. El resultado, no le busquemos, es lógico. Aparte, nosotros lo pedimos: No nos hagamos muchas ilusiones, el cuadro que lleva México no da más que para tres juegos. Nos queda Arabia Saudita, juegan los líderes del grupo Polonia-Argentina y por ahí goleando a Arabia quizá lleguen en un segundo lugar, solo que hay que vencer a Arabia que ya triunfó sobre Argentina. El panorama, no nos engañemos, está negro.
Todo un océano de sospechas generó la información divulgada antier por la magistrada Yolanda de la Torre, cuando anunció que se habían cumplimentado debidamente tres órdenes de aprehensión.
Es que aquello del “cumplimentado debidamente”, para los que no saben de leyes, quiere decir que fueron detenidas tres personas, aunque nunca dijo nombres, el jurado popular los identificó.
Y todo mundo corrió a celebrar, puesto que por fin las redes justicieras atraparon a alguien de los muchos responsables del saqueo a las arcas estatales.
Cierto, Yolanda no dio nombres, nadie dio nombres, pero… los que se creían detenidos, andan más libres que el viento. Pronto creció el sospechosismo y, pues también pronto se aclaró que no hay nadie detenido en ninguna parte del mundo.
Alguien filtró los nombres de los “Ruben’s” (Calderón, Velasco y Velasco) Palencia y otros, pero… qué creen, que apenas se divulgaron por ahí sus iniciales y la gente corrió hecha bolas a desnegarlo, que los susodichos exfuncionarios se pasean por nuestras calles como el mismísimo viento, sin ninguna restricción, por lo que ahora no pocos piensan que se está aplicando el criterio de Benito Juárez: “A los amigos, justicia y gracia, pero a los enemigos, justicia a secas…”.
Nadie entendió la información que presumió la magistrada De la Torre, por el contrario, como reguero de pólvora se expandió la idea del perdón a los amigos que se cansaron de expropiar los dineros educativos.
Atracos de los que puntualmente ha dado detalles el nuevo secretario de Educación Guillermo Adame Calderón, de modo que… el saqueo existió, pero ni por el volumen extraído fue detenido nadie.
Anotar por separado que el saqueo a las arcas educativas es algo que tiene bastante encaboronado al presidente Andrés Manuel López Obrador y ha exigido se persiga a los pillos y se recupere el dinero.
O es debido a esa petición presidencial por lo que se aplicó la sentencia juarista, para hacer como que hacen sin hacer nada, esa es pregunta que nos hacemos nosotros.
No obstante que el jefe de la nación ha mandado varios mensajes al gobernador Esteban Villegas para que se faje los pantalones, se arremangue la camisa y traiga o le traigan a los hampones.
Es correcto, la presunción de inocencia obliga a las autoridades a cuidar nombres y apellidos. Así lo exige el librito, hay que cuidar los generales del indiciado hasta que un juez diga lo contrario.
Ya cuando el juez confirma que, efectivamente, los sospechosos se robaron los montonales de dinero educativo, entonces sí se pueden mencionar nombres y apellidos, antes no.
Aparte, algo que la gente no entiende por más que se le explica, hay que taparle los ojos o esa parte de la cara para seguir preservando la presunción de inocencia. Si algún medio publica la cara con sus nombres, se sanciona al medio y se libera al detenido.
Aunque, aquí no hay problema, no hay detenidos o por lo menos nadie de los sospechosos del quebranto estatal están sometidos a juicio, algo que es posible decirlo sin afectación al debido proceso. Pero si no hay nombres, no hay nadie detenido y la búsqueda de los ladrones no pasa del buen ánimo policial, aquello no tiene razón de ser. Estamos gritando en las dunas de Qatar, nadie nos escucha.
Luego, tras las afirmaciones de la magistrada presidenta del Tribunal Superior de Justicia, la fiscal Sonia Yadira de la Garza aseguró que se están investigando 2,300 carpetas también sospechosistas de 40 denuncias por los muertos por meningitis. Sin incluir los casos de “secuestro” de los cadáveres para obligar a los familiares a retirar las denuncias, claro.
Más tarde, se dijo que eran 2,300 documentos que se encontraron en el ya afamado hospital Del Parque, aunque la gente creyó que eran otras tantas carpetas de investigación abiertas precisamente por la autoridad y no es así.
Sobre el brote de meningitis tampoco hay nadie detenido, no obstante que los expertos han concluido sus investigaciones y sostienen que todo se originó en las condiciones insalubres tanto del quirófano como del procedimiento, además de “trucos” que se hacían para ahorrar otra lana, como es el “calentar” las jeringas usadas o muchas veces usadas en otras parturientas.
Hay sospechas firmes sobre cómo y dónde nació la meningitis y, ¿qué creen? No hay un solo detenido, y para estas alturas el principal responsable, aunque tuvo muchos cómplices, funcionarios del pasado gobierno, ha de ir poquito más allá de Qatar.
No es mala la propuesta de Alejandro González Yáñez, mejor conocido en el rumbo de la Lucio Caguamas como Gonzalo, quien propuso ayer ante la tribuna del Senado de la República que los dineros municipales se envíen directamente a los municipios.
La ley, particularmente el 115 constitucional, ordena que no haya intermedios entre los gobiernos federal y municipal. Ninguna razón existe para que se manden a la tesorería estatal para que de ahí los distribuyan a los municipios, pero en los hechos no se cumple ese mandato.
O sea que, no se requiere una reforma en la materia, sino un ajuste en las formas de triangular los dineros, porque, como pasó en el gobierno pasado, los dineros llegaban, cuando llegaban, bastante rasurados, un poco alterados en los totales y en muchos casos ni siquiera llegaron.
Ojalá le hagan caso al senador Gonzalo, que se instrumenten las formas de entregar esos dineros y que ya no haya intermediarios, porque no debe haber de acuerdo al 115 constitucional.
Es que muchos de los municipios más pobres de la entidad, bajo ese criterio inconstitucional de enviarlos primero a las tesorerías estatales, cada vez serán más pobres y sin esperanza de que aquello cambie.
La marcha triunfal programada para mañana por el presidente Andrés Manuel López Obrador está de más. El jefe de la nación no tiene qué demostrar nada a nadie, es la autoridad máxima del país.
Sin embargo, en el puro acarreo de la gente se está botando la Federación cientos o miles de millones de pesos, además de las “aportaciones voluntarias” de los gobiernos morenistas.
No estamos de acuerdo en ese proceder. No hace falta para saber que la autoridad legítima descansa en López Obrador. Repetimos: No tiene que demostrarle nada a nadie.
Que mañana se llenarán las calles de la Ciudad de México para demostrar músculo, está mal. El presidente de la República no gana nada con esa marcha, como la mayoría de los asistentes son acarreados el movimiento carece de legitimidad, y se expone más a perder que a ganar.
Esas son las acciones que molestan del señor presidente, como molesta y traerá consecuencias jurídicas la absurda orden dada a la secretaria de seguridad para que ignore a los jueces y no liberen a ningún sospechoso, con amparo o sin amparo.
El mandatario está demostrando su desconocimiento de la regla, está invadiendo esferas que le son ajenas al Poder Ejecutivo, está pisoteando los derechos de los ciudadanos y está violando la presunción de inocencia. La orden presidencial seguramente será botada o desechada por la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Amen de que la Ley de Amparo advierte que aquel que se atreva a desobedecer un mandato judicial, no nada más se expone a una sanción, sino a la pérdida de la libertad. Eso es gravísimo que a los más no deja de sorprender por lo absurdo.
El que anda muy acomedido para recuperar las finanzas del estado es el diputado morenista Christian Jean Esparza, quien propuso cobrar un impuesto especial por la extracción de materiales del suelo y subsuelo.
Aunque aclaró que este impuesto no va dirigido al ciudadano común, sino a aquellas personas físicas y morales que extraigan, exploten o aprovechen del suelo y subsuelo materiales iguales o de naturaleza semejante a los componentes del terreno, tales como rocas, piedras, sustrato o capa fértil.
Esto suena muy bonito y conmueve hasta las lágrimas, que un diputado se ponga la camiseta y con buenas “ocurrencias” quiera demostrar su amor por Durango, pero no su amor ni su solidaridad por los duranguenses.
Pues al no explicar o extender bien el contenido de esta medida, parece que se busca afectar o sacar lo que se pueda a esas personas que no forman parte de grandes empresas o industrias, sino que se dedican por su cuenta a la extracción de arena, grava, cantera, mármol, materiales empleados regularmente en la construcción, y por qué no de una vez incluir hasta a los ladrilleros por eso de que usan tierra para los adobes.
Tal parece que en lugar de ser conscientes de la crisis económica que atraviesa la ciudadanía, algunos personajes políticos solo ven por sus intereses y no por los de las familias que representan, solo falta que quieran cobrar nuevamente impuestos por puertas, ventanas, perros, caballos y carros, algo que se hacía allá por 1850 en tiempos de Santa Anna.
A unos días de que inicie el mes de diciembre, que se caracteriza no solo por ser el último mes del año, sino especialmente por sus celebraciones tradicionales tanto en el país como incluso a nivel mundial, la Suprema Corte de Justicia de la Nación ha creado polémica en cuanto a las tradiciones de la mayoría de los mexicanos, por la decisión que tomó respecto a la instalación de nacimientos y otras decoraciones que tienen connotaciones religiosas y son muy comunes en esta temporada en edificios y espacios públicos, al prohibirlos en cumplimiento con lo que establece la Constitución con respecto a todo lo relacionado con religión.
Como lo señalara el diputado Luis Enrique Benítez, al abordar un tema en el que existía conflicto entre dos derechos, la Corte se pronunció por uno de ellos, de acuerdo a la consideración de sus integrantes, sin que ello implique que va en contra de la ley, aunque la división de opiniones inicia cuando muchos ciudadanos han protestado por esta determinación, después de muchos años en los cuales la decoración navideña en espacios y edificios públicos incluyó la instalación de los tradicionales nacimientos.
No solamente porque se trata de un aspecto relacionado con las creencias de la mayoría de los mexicanos y con las tradiciones que forman parte de la cultura de este país, sino porque hay casos particulares donde los efectos de tal determinación van más allá de cambiar una tradición, como es el caso de la capital del estado, donde cada año se tiene esa decoración en mayor escala en un espacio público como es el Parque Guadiana, lo cual atrae a miles de visitantes durante la temporada y, con ello, se benefician docenas de comerciantes que se instalan en ese lugar y sus cercanías, quienes ahora han expresado preocupación por los efectos que tal medida tendrá en sus ventas.
Ahora el reto es para las autoridades estatales y municipales, especialmente estas últimas que son las encargadas de la decoración navideña en algunos espacios y vialidades, pues primero tendrán que apresurarse para instalar los elementos que tienen preparados, antes de que la decisión de la SCJN entre en vigor y, en segundo lugar, desde ahora tendrán que buscar opciones para mantener un atractivo turístico sin ir en contra de tales disposiciones.
Están científicamente confirmadas nuestras sospechas de que había nueve pacientes con muerte cerebral en el 450. Anoche murió la número 13. Un conteo catastrófico que alguien debe detener.
Ayer el prestigiado infectólogo nacional Alejandro Macías aseguró que él tiene la seguridad de que a las pacientes se les está brindando la mejor atención médica posible.
No sirve de nada que se les preste una buena atención médica, pues parece que todas habrán de morir porque de ese tamaño es el daño causado por la meningitis.