- Supremo corte al plan B
Las violaciones al procedimiento legislativo, eran un argumento contundente para que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), sepultara de una vez por todas el Plan B de la reforma Electoral, impulsado por el Presidente López Obrador. El proyecto propuesto por Alberto Pérez Dayán convenció a otros 8 ministros, entre ellos, al expresidente de la Suprema Corte, Arturo Zaldívar, lo cual fue lo que más sorprendió, puesto que a él se le veía muy recargado en la 4T, no olvidemos que el inquilino de Palacio Nacional, hizo hasta lo imposible para que Zaldívar permaneciera al frente, sin embargo, éste no cumplió con los sueños tabasqueños. Así pues, con 9 votos a favor y 2 en contra, incluyendo el de la plagiaria Yasmín Esquivel, le dieron un supremo corte al Plan B, al declarar la invalidez del 1er decreto de las reformas político-electorales, con el que se pretendía modificar las Leyes Generales de Comunicación Social y de Responsabilidades Administrativas.
Una vez que los ministros le quitaron la bata al Plan B, para sacudirle los cabellos de aquel supremo corte a la “Lupillo Rivera”, el alcohol que frotaron en el cuero cabelludo expuesto, provocó un ardor extremo. Las huestes cuatroteístas exigieron a la SCJN, respeto a la voluntad democrática de la mayoría parlamentaria, que de acuerdo con un comunicado que hicieron circular, “reformó las leyes electorales, para evitar dispendios y reducir burocracias doradas”. Previamente, la Consejería Jurídica de la Presidencia de la República, había señalado mediante otro comunicado, que de llegar a invalidar el Plan B, la SCJN estaría sustituyendo al Congreso de la Unión, solo que, los argumentos del Ministro Pérez Dayán, como tijeretazos, le tumbaron el “gallito” y de ahí se pasaron al copete, y cuando menos acordaron, ya se la habían…rapado.
Los ataques durante 15 días en las afueras de la SCJN, principalmente en contra de Norma Piña, han sido una presión enorme para el Poder Judicial; pese a ello, los ministros no se despeinaron, y su dictamen fue con absoluto apego a la Constitución. Tal como lo sentenció Lorenzo Cordoba, exconsejero presidente del Instituto Nacional Electoral (INE): “la SCJN es el órgano garante del orden democrático y constitucional, frente a los eventuales actos violatorios al mismo por parte de los poderes políticos”, por lo tanto, sería altamente preocupante para todos, -incluyendo a los que ahora reniegan por el veredicto de la Suprema Corte-, que se permitieran las violaciones a las reglas bajo las que se rige nuestra democracia. Ejemplos hay varios en América Latina, no hay necesidad de experimentar en medidas que a la larga -o a la corta- nutran los afanes autoritarios de “alguien”.
Ha trascendido que integrantes de la 4T, están convocando a una manifestación en la Suprema Corte para el sábado 20 de mayo, pero ahí no radica lo medular, sino en el llamado del presidente López Obrador a poner en marcha el Plan C, que implica “desgreñar” en las urnas en 2024 a los “conservadores”. El grito de guerra electoral se lanzó desde hace tiempo en la “mañanera”, y lo reiteró el secretario de Gobernación Adán Augusto López en sus redes sociales, luego de conocer el fallo. El corte supremo al Plan B, en efecto, acabó con una parte del mismo, pero aún queda otro paquete, y algunos meses para que le crezca más cabello a la 4T, así que la oposición no debe confiarse, porque en este Ambiente Político, hasta el más pelón, se hace trenzas.