
Durango, Dgo.
Una víctima de robo, asaltada por un par de ladrones en motocicleta, decidió perseguir a los presuntos delincuentes con su coche después del atraco; sin embargo, cuando pensó que les había dado alcance, se confundió y embistió a las personas equivocadas.
Las víctimas son la niña Kimberly C de 8 años de edad, quien fue reportada en estado crítico a causa de un traumatismo craneoencefálico severo; y el señor Jorge Rosas Lugo de 62 años, quien resultó policontundido.
Pese a ello, los delincuentes fueron detenidos gracias a que volvieron a la zona del ilícito y los vecinos los identificaron.

Todo comenzó cuando Ricardo V., de 22 años de edad, fue abordado al salir de su domicilio ubicado en el fraccionamiento San Isidro, a eso de las 06:00 horas de este martes, por dos desconocidos en motocicleta que lo amagaron para robarle su celular y dinero.
Una vez que lograron su cometido, se alejaron de la zona en la unidad de dos ruedas y el joven subió a su coche, un Ford Focus de color verde, para ir tras ellos.
Cuadras después, ya sobre la avenida Zacatecas, creyó tenerlos a la vista y los embistió con el carro para detenerlos. Sin embargo, se equivocó y causó lesiones de consideración tanto a un señor de 61 años, de nombre Jorge Rosas Lugo, y a una niña de edad no precisada que lo acompañaba.
Todo indica que los delincuentes, al ver el accidente, decidieron regresar a la zona del atraco. Pero ya para entonces, Ricardo había alertado a sus vecinos sobre su aspecto y estos, al verlo, los retuvieron e incluso golpearon.
Poco después arribó la Policía y los aseguró, vigilando además la asistencia médica a ambos por parte del personal de la Cruz Roja Mexicana. Ellos son José Juan S. G., de 19 años de edad; y Camilo V. H., de 20 años.
Tanto las víctimas embestidas en motocicleta como los delincuentes resultaron lesionados; los primeros fueron trasladados al Hospital del Instituto Mexicano del Seguro Social, mientras que los segundos fueron llevados al Hospital General 450 con resguardo policial
El caso quedó en manos del agente del Ministerio Público.