
Durango
La trágica muerte del oficial José Juan Medina Pérez, de 38 años, ocurrida recientemente, ha generado gran consternación en la comunidad. Y es que, como se ha informado, el agente perdió la vida mientras realizaba su trabajo, atendiendo una instrucción del alcalde José Antonio Ochoa.
Todo comenzó durante uno de los encuentros del programa “Hablemos de frente”, en la Colonia Luz y Esperanza, cuando vecinos de la zona manifestaron su preocupación por un problema que estaba afectando a la seguridad de la comunidad: jóvenes de entre 12 y 15 años estaban lanzando piedras a los vehículos que transitaban por el periférico.
El oficial Medina Pérez y su equipo decidieron tomar cartas en el asunto y realizar patrullajes para intimidar a los responsables.
Sin embargo, durante uno de estos operativos, fueron sorprendidos por un grupo de jóvenes que continuaban lanzando piedras a los autos.
En ese instante, una de ellas impactó en la cabeza del oficial, causándole la muerte horas después en el hospital 450.
Es lamentable que un acto tan noble como el de proteger a la comunidad haya tenido como resultado la pérdida de una vida.