El arrestado conducía un vehículo que los investigadores piensan que estuvo involucrado en esas muertes, tres de las cuales se produjeron en las últimas semanas, informó en Twitter el jefe de la Policía de Albuquerque, Harold Medina.
En una rueda de prensa posterior, el subcomandante Kyle Hartsock, de la Policía de Albuquerque, explicó que las autoridades vinculan al sospechoso, identificado como Muhammad Syed, de 51 años, con dos de los asesinatos al existir indicios de que fue usada la misma arma de fuego y anticipó que van a presentarse cargos contra él.
Respecto a los otros dos asesinatos, la policía continúa sus pesquisas sobre cualquier posible relación del detenido con esos delitos.
Las muertes por arma de fuego de los cuatro hombres han puesto sobre alerta a la población musulmana de Nuevo México que, según medios estadounidenses, teme salir de casa por la noche ante el temor de ser asaltados.
Las autoridades investigan si las víctimas fueron buscadas y atacadas por su religión.
Dos de los muertos eran de origen pakistaní y acudían a la misma mezquita, mientras que otro, asesinado el año pasado, provenía de Afganistán.
El último asesinato se produjo el viernes. La víctima fue atacada poco después de acudir al funeral de los dos pakistaníes.
En un mensaje en redes sociales publicado en la tarde del domingo, el presidente estadounidense, Joe Biden, dijo sentirse “enfadado y apenado” por las muertes de los cuatro hombres.
“Mientras esperamos los resultados de la investigación, rezo por las familias de las víctimas, y la comunidad cuenta con el firme apoyo de mi Administración”, escribió el presidente. EFE