- Al corte de agosto del presente año, a nivel país se registraron 20,330 ingresos de pacientes con diagnóstico de Diabetes Mellitus Tipo 2.
- México ocupó el lugar 8 entre los primeros países con mayor gasto sanitario total, debido a la diabetes, en 2021.1
Ciudad de México.- De acuerdo con la Federación Internacional de la Diabetes (IDF, por sus siglas en inglés), en México alrededor del 47.5% de los pacientes con diabetes no han sido diagnosticados. Ocupa el séptimo lugar a nivel mundial con mayor número de personas viviendo con diabetes.[1] En ese sentido, la Diabetes Mellitus Tipo 2 es la enfermedad con una alta prevalencia en el país y los estados que reportaron mayor incidencia fueron: Tabasco, Jalisco y Puebla.[2]
La diabetes ha emergido como una de las principales preocupaciones de salud de forma global. Se estima que aumentará al 11.3% en 2030 (643 millones) y al 12.2% (783 millones) en 2045.1 El impacto del padecimiento es multifacético y llega a desencadenar complicaciones médicas graves, como trastornos cardiovasculares, neuropatías y problemas de visión que a largo plazo generan un impacto en la estabilidad financiera de las familias y en los sistemas de atención médica.
Por ello, al identificar a las personas en riesgo en las primeras etapas, se pueden implementar medidas preventivas y estrategias de manejo que promuevan un mayor cumplimiento del tratamiento y una mejor calidad de vida.
Dra. María Elena Sañudo
Directora Médica de la Unidad de Medicinas Generales de Sanofi México.
“Al segundo trimestre del presente año, en el país se registraron 20,330 ingresos de pacientes con diagnóstico de Diabetes Mellitus Tipo 2.[3] En Sanofi, trabajamos incansablemente para reforzar la educación acerca de la diabetes y generar una cultura de conciencia. Tenemos un compromiso con los pacientes, por ello es que hemos desarrollado herramientas tecnológicas como “My Dose Coach” y “Entregando Salud Pacientes” que brindan apoyo para controlar el seguimiento de este padecimiento’’
Asimismo, se necesita un enfoque integral que incluya la promoción de estilos de vida saludables, la educación y asesoría sobre el seguimiento de la enfermedad así como mejorar la alimentación e impulsar la actividad física regular, esto para poder prevenir y evitar complicaciones. A nivel