- Provocaría inflación del 7 al 15% en vegetales, frutas y carnes
Por: Andrei Maldonado
Arnoldo Gutiérrez Maldonado, vicepresidente de Asuntos Financieros y Mercados de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco), habló sobre la inflación en algunos alimentos y las complicaciones que vendrán por el arancel del 17 por ciento al tomate mexicano que se busca imponer por el gobierno de Estados Unidos.
Señaló que en 2024 y 2025 continuaron las presiones por parte de productores estadounidenses para terminar el acuerdo de suspensión, lo que podría significar la aplicación de aranceles a las exportaciones mexicanas de tomate; “aún no hay una decisión definitiva, pero el riesgo está latente”.
El impacto económico potencial si se aplican aranceles incluye un aumento en los costos, por lo que los tomates mexicanos serían más caros para el consumidor estadounidense, lo que podría reducir la competitividad frente a productores locales o de otros países, con pérdidas de empleo.
El entrevistado ahondó en que las exportaciones se realizan principalmente desde Sinaloa, Baja California, Sonora y Michoacán, donde habría pérdidas para productores mexicanos; “esto ya está provocando inflación del 7 al 15 por ciento en vegetales, frutas y carnes”, puntualizó.
En Estados Unidos, aproximadamente entre el 65 y el 70 por ciento del tomate fresco consumido proviene de México, por lo que de aprobarse estos aranceles se podría llegar a tener una inflación alimentaria en el vecino país, todo por la falta de acuerdos entre productores y compradores.
Según la Associated Press, México suministra alrededor del 70 por ciento del mercado estadounidense de tomate, un aumento desde aproximadamente el 30 por ciento de hace dos décadas. Se cree que la carga del arancel podría aligerarse si se comparte entre importadores y exportadores.

