En declaraciones a la televisión letona en los márgenes de la cumbre de líderes de la OTAN en Madrid, Levits afirmó que la brigada, que supondrá una ampliación del contingente actual, de unos 1.200 soldados de diversas nacionalidades, contará con elementos permanentes y rotatorios.
Explicó que un mayor número de efectivos estarán presente de forma constante en Letonia, mientras que otros elementos, necesarios para que la brigada alcance su fuerza de combate completa, estarán preparados para ser desplegados a corto plazo para asumir labores defensivas.
El correspondiente acuerdo fue firmado oficialmente en la cumbre por el ministro de Defensa letón, Artis Pabriks, y su homóloga canadiense, Anita Anand.
“Una brigada no se refiere sólo al número de personas, lo primario son las capacidades de combate, que deben ser incrementadas,” dijo Levits a la agencia LETA.
“Nosotros también hemos hecho nuestros deberes, con rapidez y en gran cantidad. Debemos crear una nueva base porque Adazi es demasiado pequeña,” afirmó, en referencia a la base actual de la OTAN en el país báltico.
El presidente letón saludó además la nueva estrategia de la OTAN de calificar a Rusia como la principal amenaza militar para la alianza y que también incluye la defensa de las fronteras con Bielorrosia, aliada de Moscú, con la que comparten límites Letonia, Lituania y Polonia.
El ministro de Defensa letón, Artis Pabriks, ha declarado recientemente que está buscando un emplazamiento para una segunda base de la OTAN que se sume a la de Adazi, al norte de la capital, Riga.
El núcleo del grupo de combate de la alianza en Letonia lo forman unos 800 soldados canadienses, a los que se han sumado otros 200 a raíz de la invasión rusa de Ucrania.
En la declaración publicada hoy, los líderes de la OTAN se comprometieron a desplegar “fuerzas robustas adicionales listas para el combate” en el flanco este de la alianza.
Desde 2017 la OTAN tiene destacados batallones multinacionales en Estonia, Letonia, Lituania y Polonia, a los que tras la invasión rusa de Ucrania se sumaron otros cuatro en Rumanía, Bulgaria, Hungría y Eslovaquia.
