Torreón, Coahuila.– Carlos Gurrola Arguijo, conocido con cariño como “Papayita” en el ejido La Concha, enfrentó durante 19 días una batalla por su vida tras ser víctima de un presunto acto de crueldad en su lugar de trabajo.
El pasado 30 de agosto, mientras cumplía su jornada en la tienda HEB Senderos, contratado por la empresa Multiservicios Rocasa, Carlos guardó un envase de Electrolit para después consumirlo. Sin embargo, alguien habría introducido un solvente en su bebida. Minutos más tarde comenzó a presentar síntomas de intoxicación severa, sin recibir atención médica inmediata.
Ante el deterioro de su salud, fue trasladado de urgencia a una clínica del IMSS, donde médicos confirmaron daños graves en tráquea, pulmones y un riñón. Permaneció conectado a respiración artificial, mientras su familia se aferraba a la esperanza de vida.
La familia de Carlos denunció públicamente que HEB se deslindó de responsabilidades, argumentando que no era empleado directo, mientras que Multiservicios Rocasa tampoco asumió el caso, llegando incluso a insinuar que se trataba de un intento de suicidio.
Sus allegados exigen que las autoridades investiguen a fondo para que no quede en la impunidad un acto que califican como de negligencia y violencia laboral.
Su familia insiste en que no se trata solo de justicia para Carlos, sino de evitar que otros trabajadores pasen por lo mismo.
