Un fuerte estallido seguido de un incendio de gran magnitud se registró la noche de este jueves en la refinería de Chevron en El Segundo, California, al sur de Los Ángeles, provocando alarma entre la población y una amplia movilización de cuerpos de emergencia.
El siniestro se originó tras una explosión que iluminó el cielo nocturno y generó una columna de humo visible desde varios kilómetros a la redonda. Testigos describieron el estruendo como “un boom similar a un terremoto”, lo que ocasionó pánico en comunidades cercanas.
Elementos del Departamento de Bomberos de El Segundo, junto con brigadas especializadas de la propia refinería y apoyo de agencias regionales, trabajaron durante horas para contener las llamas y evitar que se extendieran a otras áreas de la planta.
Aunque hasta el cierre de esta edición no se reportan víctimas mortales ni heridos, las autoridades locales emitieron un llamado preventivo a los residentes para permanecer en sus hogares debido a la densa nube de humo que se dispersó en la zona.
El gobernador de California, Gavin Newsom, confirmó que su administración coordina acciones con instancias estatales y locales para garantizar la seguridad pública y atender cualquier emergencia de salud ambiental.
Por su parte, la empresa Chevron aún no ha detallado la magnitud de los daños ni la posible causa de la explosión, aunque aseguró que la prioridad es salvaguardar a los trabajadores y a la comunidad.
La refinería de El Segundo es una de las más grandes de California, con capacidad de procesar más de 270 mil barriles de crudo al día, lo que la convierte en una instalación estratégica para el suministro energético de la región.
Incidentes como este reavivan la preocupación sobre la seguridad industrial y el impacto ambiental de la operación de refinerías en áreas densamente pobladas.