Durango, Dgo. – La Secretaría de Salud de Durango ha iniciado un proceso de despidos de personal contratado, en lo que representa una de las medidas de ajuste laboral más importantes en el sector en los últimos años.
De acuerdo con información oficial, en esta primera etapa se concretaron alrededor de 200 bajas, aunque la meta planteada por la dependencia es llegar a 800 trabajadores desvinculados antes de que concluya el año.
Los despidos corresponden a personal bajo contrato, es decir, trabajadores que no cuentan con base, por lo que su permanencia depende de la renovación periódica de convenios. La decisión responde a una política de reestructuración interna, que según las autoridades busca optimizar recursos y reorganizar la plantilla de la Secretaría.
Los recortes generan incertidumbre entre empleados y organizaciones sindicales, ya que se teme que esta reducción afecte la calidad de los servicios de salud en diversas comunidades del estado, particularmente en aquellas donde el personal médico y administrativo ya es insuficiente.
Al mismo tiempo, especialistas en temas laborales advierten que este proceso podría agudizar la precarización del empleo público en el sector, al dejar fuera a trabajadores con años de experiencia y sin ofrecerles alternativas de reubicación.
Se espera que, en las próximas semanas, la Secretaría de Salud defina las áreas específicas donde continuarán los recortes. Mientras tanto, asociaciones civiles y trabajadores han comenzado a organizar pronunciamientos para exigir que las autoridades transparenten los criterios utilizados en el proceso de despido y planteen soluciones que no pongan en riesgo la atención a los pacientes.