Al cierre del año al gremio de la construcción se le siguen adeudando alrededor de 600 millones de pesos por obra ejercida durante la pasada administración, monto del cual aún esperan poder recuperar, informó Raúl Montelongo, presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC).
Indicó que este monto incluye los 300 millones de pesos que se le deben al sector que provee servicios de construcción, pero no está agremiado a la CMIC, además de los debidamente integrados, mismo que se debe desde la pasada administración estatal y que se ha buscado por la actual gestión poder subsanar.
Montelongo Nevárez reconoció que esta situación representa un difícil momento para los industriales del ramo de la construcción, pues se debe de cumplir con la obligación por ley del pago de aguinaldo a los trabajadores, que sumando a la inflación provoca un panorama poco alentador para el próximo año.
El líder empresarial señaló que actualmente hay poca obra pública y la inversión privada, pese a ser el 80 por ciento de las inversiones que se llevan a cabo actualmente, no alcanza para que las más de 18 mil familias que dependen de este ramo en el estado tengan ingresos que garanticen una vida digna.
El presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción agregó que muchos de los trabajadores de este sector han tenido que emigrar a otros estados en busca de obra; otros han cerrado sus empresas o dado de baja personal; “hasta el momento se reportan cuatro cierres de empresas agremiadas”.