Lerdo, Dgo.
Un niño de 20 meses de edad murió en el municipio de Lerdo al quedar sumergido durante algunos minutos en la alberca de una quinta campestre, ubicada en una localidad rural, de la cual es empleado su padre.
La víctima fue llevada de urgencia a un hospital por su padre, Martín Gerardo V. R., pero el personal médico que lo recibió no pudo hacer nada para salvarlo.
Según la información disponible, el niño vivía junto a sus padres en una quinta denominada “Chalío”, ubicada sobre la avenida Benito Juárez de la localidad de Villa Juárez.
El niño había estado jugando en el patio del amplio lugar mientras su padre, al que le ofrecían vivienda como parte de sus prestaciones laborales, realizaba tareas de limpieza y mantenimiento.
Después de unos minutos sin escuchar al infante, Martín comenzó a buscarlo y lo encontró sumergido en una alberca; se apresuró a sacarlo y el pequeño ya estaba inconsciente, por lo que decidió subirlo a su camioneta.
En ella avanzó a toda prisa hasta las instalaciones de la Cruz Roja Mexicana en Lerdo, donde el personal de guardia lo revisó y ya no encontró signos vitales, por lo que se dio aviso al Servicio Médico Forense para los procedimientos de ley.