“Ha sido un viernes interesante, como siempre aquí en Baku. Hubo unos cuántos retos durante el primer entrenamiento libre, en el que lo pasé mal con los botes (que daba el coche, sobre todo en la larga recta del circuito), que convirtieron en incómoda la sesión”, explicó Sainz, de 27 años, que tras repetir en Mónaco el segundo puesto logrado el año pasado, ocupa la quinta plaza del Mundial, con 83 puntos, 42 menos que el líder, el neerlandés Max Verstappen (Red Bull).
“Trabajamos en la buena dirección en el segundo entrenamiento libre, mejorando en competitividad y en buenas sensaciones”, indicó el talentoso piloto madrileño, que hace dos domingos festejó su décimo podio en la F1, el octavo desde que pilota en Ferrari.
“En líneas generales la segunda sesión fue suave, a pesar de no poder completar una vuelta rápida entera con los neumáticos blandos debido a las banderas amarillas. Esperamos dar otro paso adelante mañana y poder completar una calificación sin problemas”, comentó el español de Ferrari este viernes en Azerbaiyán. EFE