- Problema también aumenta riesgo de incendios forestales
Por lo menos 300 hectáreas ubicadas en la Sierra de Durango están siendo infestadas por la plaga del gusano descortezador, lo que propicia también que aumente el riesgo de incendios forestales, informó la secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Claudia Hernández Espino.
Manifestó que este insecto aparece en las temporadas de escasez de lluvias y lo que provoca es una madera sin corteza expuesta a secarse, por lo que es más propensa a generar incendios; “estamos hablando de 300 hectáreas del municipio de San Dimas que ya están siendo contenidas”, puntualizó.
Detalló que fue en el ejido Salvador Allende donde se registró el primer incendio forestal de la temporada el pasado fin de semana, aumentado por los fuertes vientos que se registraron como consecuencia de la presencia de un frente frío, una situación que será constante a partir de este mes de noviembre.
La funcionaria estatal indicó que fue poca el área la afectada en número de hectáreas, sin embargo, causó gran alarma ya que se encontraba muy cerca de un centro ecoturístico, lo que obligó a la rápida actuación por parte de las propias brigadas rurales del lugar, ubicado en el municipio de Durango.
Se estima que sea una temporada complicada en materia de incendios tras la prolongada sequía, que mantiene secos los pastos, que suelen ser presa del fuego cuando se dejan fogatas encendidas o se arrojan colillas de cigarros, por lo que pidió a la población a extremar precauciones en ese sentido.
Hernández Espino recordó que el 95 por ciento de los incendios forestales al año son provocados por la actividad humana, de ahí la importancia de generar conciencia en quienes visitan las cabañas de la Sierra de no contribuir con su descuido en la destrucción de los bosques duranguenses.